El lago de los cisnes
Empieza otra temporada de El lago de los cisnes. Chapultepec se disfraza por un rato de fantasia, ballet, historias de amor y cisnes...
Y es una de las épocas que más recuerdos me trae, momentos increibles de mi vida, me llena de emociones.... pero no todas estas emociones son buenas. Algunas, más de las que quisiera, a ratos me hacen derramar una lagrima. Son recuerdos bonitos, pero también que recuerdan cosas que duelen.
El lago de los cisnes me recuerda a mi abuelita, esa es la verdad. Tal vez es mi ballet favorito porque era el de ella, y me llena de recuerdos tal vez porque fuimos nosotras (mamá, mi hermana y yo) quienes la llevamos a la isleta del lago de Chapultepec a verlo.... Y en el fondo aunque es un recuerdo muy feliz y muy afortunado no es sencillo. Porque ella me hace mucha falta, muchísima falta todavia. Y el lago de los cisnes es tan ella...
Después de perderla tarde mucho en volver a oir a Tchaikovsky, en ver ballet, en siquiera pensar en volver a ir a ver El lago de los cisnes.... pero volví a hacerlo, aunque ese día casi no voy, aunque sentía el corazón acongojado, aunque ese día parecía perdida de todo el mundo y nadie sabía ni como tratarme.
Vero, Dani, Ximena y yo fuimos juntas a ver El lago de los cisnes, nos saltamos clases para hacerlos, pero era importante para nosotras, era importante hacerlos juntas... Era muy importante para mi poder estar ahí con ellas y tener un momento muy feliz con el que exorcisar lo que me dolía. Y ese día yo no pude decirselos, aunque eran mis mejores amigas, no podía ponerlo en palabras porque intentaba mantener mi paz interna, aunque tal vez ellas lo notaron... me pareció verlo en las palabras de Vero al despedirme ese día (siempre tan linda conmigo). Pero no pude decirlo.
Me gustaría mucho que El lago de los cisnes trajera a mi mente más que el hecho que ya no puedo compartilo con mi abuelita, que el hecho de que nunca más ire con Ximena, que todas esas cosas...
Y aunque me recuerda una sonrisa en el rostro de mi abuelita, una de las personas más importantes de mi mundo, y una escapada maravillosa con mis amigas, aún tengo emociones encontradas con la temporada de ballet.
Sin embargo, aunque me derpime muy seguido, me recuerda que mis amigas estuvieron para ayudarme a exorcisar un lugar y un momento.
Y es una de las épocas que más recuerdos me trae, momentos increibles de mi vida, me llena de emociones.... pero no todas estas emociones son buenas. Algunas, más de las que quisiera, a ratos me hacen derramar una lagrima. Son recuerdos bonitos, pero también que recuerdan cosas que duelen.
El lago de los cisnes me recuerda a mi abuelita, esa es la verdad. Tal vez es mi ballet favorito porque era el de ella, y me llena de recuerdos tal vez porque fuimos nosotras (mamá, mi hermana y yo) quienes la llevamos a la isleta del lago de Chapultepec a verlo.... Y en el fondo aunque es un recuerdo muy feliz y muy afortunado no es sencillo. Porque ella me hace mucha falta, muchísima falta todavia. Y el lago de los cisnes es tan ella...
Después de perderla tarde mucho en volver a oir a Tchaikovsky, en ver ballet, en siquiera pensar en volver a ir a ver El lago de los cisnes.... pero volví a hacerlo, aunque ese día casi no voy, aunque sentía el corazón acongojado, aunque ese día parecía perdida de todo el mundo y nadie sabía ni como tratarme.
Vero, Dani, Ximena y yo fuimos juntas a ver El lago de los cisnes, nos saltamos clases para hacerlos, pero era importante para nosotras, era importante hacerlos juntas... Era muy importante para mi poder estar ahí con ellas y tener un momento muy feliz con el que exorcisar lo que me dolía. Y ese día yo no pude decirselos, aunque eran mis mejores amigas, no podía ponerlo en palabras porque intentaba mantener mi paz interna, aunque tal vez ellas lo notaron... me pareció verlo en las palabras de Vero al despedirme ese día (siempre tan linda conmigo). Pero no pude decirlo.
Me gustaría mucho que El lago de los cisnes trajera a mi mente más que el hecho que ya no puedo compartilo con mi abuelita, que el hecho de que nunca más ire con Ximena, que todas esas cosas...
Y aunque me recuerda una sonrisa en el rostro de mi abuelita, una de las personas más importantes de mi mundo, y una escapada maravillosa con mis amigas, aún tengo emociones encontradas con la temporada de ballet.
Sin embargo, aunque me derpime muy seguido, me recuerda que mis amigas estuvieron para ayudarme a exorcisar un lugar y un momento.
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