La llamada

Te llamé hace un año, justo un día como hoy. 

Te llamé un tanto muriendo de nervios. Había estado pensándolo por mucho tiempo, no horas sino días, pero al final te llamé después de mi clase, aprovechando la soledad de la oficina.

Fue como una llamada para hacer las paces, fue como una llamada de "por favor contestame", fue una llamada para reconocer que me hacías falta. Fue una llamada que necesitábamos hacía tiempo.

Apenas habíamos hablado en los últimos cuatro meses y me había resultado insoportable, aunque me negaba a reconocerlo. Se me ocurrió que también a ti. Y que cuando llamé hubo los mismos nervios y el mismo alivio. 

Te llamé hace un año. Y entendí que no te quería fuera de mi vida nunca más. 

A la distancia, lo que más agradezco es haber juntado el coraje ese día para llamarte, para volver a estar. Para acompañarte hasta el final. 

Comentarios

Entradas populares